23 de febrero de 2015

7º en la Maratest 15km

El domingo 22 de febrero, se celebró en Badalona la 4ª edición de la Maratest. Una prueba que ofrece a los corredores la opción de competir en 15km o 30km. Esta segunda distancia está pensada para hacer la última tirada larga antes del Maratón de Barcelona. Personalmente me hacía ilusión volver a la carrera donde hacía 3 años había logrado mi primer pódium, siendo 3º en la distancia de 15km. Este año, llegando en un buen momento de forma, no era descabellado pensar que podría repetir.

La organización de la prueba correcta, el circuito bien señalizado, con pasos kilométricos bien marcados, en mi caso, la recogida de dorsales correcta y eso que fui a última hora el mismo domingo (eso si, no habían ya las mochilas donde te ponían el la camiseta y el número) a mi la mochila me da igual, pero es un error de cálculo por su parte. Guardarropa de 15km correcto, el de 30km desbordado a poco más de 15 minutos para dar la salida. No se como acabaría y si todos pudieron salir a tiempo. Servicio de duchas en buen estado, al menos para los que llegamos primero después de los 15km, los de 30 ya no se como lo tendrían. Avituallamiento cada 5 km y en meta, agua, naranja, plátano y algo más que nos pusieron en la bolsa.

Las sensaciones previas no eran malas. La media maratón de Barcelona había ido dentro de lo esperado. Quería un poco más, pensaba que podía estar rondando la 1h14min y algo, pero me fui a la 1h 15min 56 seg. Lo que es mi mejor marca personal. Disfruté de la media y tuve un día decente. El grupo de la 1h 15min fue genial. Las liebres corriendo a buen ritmo, sin darnos mucho la brasa con ánimos o continuas referencias de tiempos y un buen final para los que querían bajar de 1h 15. Así que aprovecho para felicitarles por su trabajo. Yo pasé bien hasta el 15, después sufrí hasta el 17 y ahí peté, pero llegué a meta con algo en el deposito para correr bien la última recta. Así que con la referencia de la media, y viendo que la semana no había sido tan mala, pensaba que estaría en mis piernas aspirar al podium.

Llegaba el momento de competir. La mañana se levantaba fría, y lo peor, con mucho viento. Ya en el corto calentamiento me di cuenta que no corría muy agusto, el frío o aire... nose que era, pero sensaciones raras. Entré en el cajón a 10 min para salir, también cosa rara en mi, ya que si puedo apuro hasta el final, pero ni miré el reloj y entré. Una vez dentro faltaban 10 minutos. Ahí parado, pasando frío. Una vez en marcha,  a las 9:30, se salía muy rápido. A mi no me gusta entrar en estas guerras de salida, pero consideraba que con tanto aire era importante entrar en el grupo que iba a luchar por el podium, quizás después, intentar llegar desde atrás podía suponer un desgaste demasiado grande. Esa fue mi decisión. Acertada? Pese al resultado creo que sí era la acertada, otra cosa que el cuerpo no respondiera. 
KM 1,5 foto de corredors.cat
 El grupo salió a ritmo de 3:20 y eso que ya sufríamos el azote del viento. Paso por el km 2 a ritmo de 3:20. Yo intentaba esconderme bien del aire, como hacen los ciclistas en días así. Buscar la formación de abanico. Pero ni así.
km 2,3 foto corredors.cat


km 3 foto de David Jimenez de blogmadito.com
Al paso por el km 5 en 17:34 creo, ya iba muy justo. El ritmo lo mismo se aceleraba, que se frenaba. Que sensaciones tan raras. Ya en el km 8 el grupo me dejaba y empezaba mi calvario. Me entraba aire de cara, de costado, del otro costado, pero porque no de culo? Cabeza abajo, y de nada sirve pensar. Solo correr lo más rápido que el cuerpo permite. Paso por el km 10 en 35:55, 20 segundos peor que en la media de Barcelona, y encima completamente vacío. Que día tan malo estaba teniendo, y unas ganas terribles de retirarme. 
Km 11,5 foto david jimenez de blogmaldito.com
 En el km 12,5 giro a izquierda y se levanta un huracán delante mio, que me hacía imposible avanzar. Suerte que solo duró unos metros y se paró un poco. Por ganas hubiera tirado recto e irme directo a meta que estaba a solo 1 km del giro. Pero defender una 7ª posición es una obligación, a no ser que una lesión lo impida. A ritmo crucero pasaba por el centro de Badalona. Si algo me gusta de esta prueba es que durante el recorrido hay bastante público, no una marea de gente, pero si vas encontrando zonas en las que vas enlazando los ánimos de los espectadores, y eso se agradece. Ya en el último kilómetro, que se hace eterno, porque prácticamente en su totalidad vas viendo a lo lejos la llegada, subía ligeramente el ritmo para no llegar a los 55 min. 
Llegada foto de running.es
 Finalmente, vacío llegaba 7º con un tiempo de 54:47 muy lejos de lo esperado.  Ahora solo queda descansar una semanita, reponerse y volver, ahora ya pensando solo en carreras de 5 y 10 kilómetros que es lo que me gusta.


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