Cursa del Poblenou: 11º de la general

Km 9,5 (Autora:Ana)

 El domingo 8 de setiembre el barrio del Poblenou de Barcelona celebró una nueva edición de su carrera atlética. Esta sería mi segunda participación, y visto lo visto, tengo la carrera cruzada. Podría ser algo así como el típico puerto de montaña que subes cuando eres ciclista y da igual que estés en buena forma, como que estés bajo mínimos, porque nunca lo subes agusto. Con esta carrera al parecer a mi me pasa esto.

A la carrera llegaba bien. Durante la semana las sensaciones entrenando habían sido buenas. Salí el martes a rodar suave 10 km, el jueves me hice 6 km rápidos, con una serie final bastante dura donde las piernas respondieron bien y el sábado un rodaje de 4 km muy suave para mover algo las piernas. Con esto esperaba estar con un puntito más que la semana pasada, porque ya sabía que en esta carrera el nivel iba a ser más alto.

La carrera del Poblenou, es de estas que vale la pena correrla, aunque solo sea por todo lo que dan al llegar a meta.  El recorrido en principio es muy bueno para poder hacer una buena marca, pero algo debe tener que siempre se acaba enganchando y hundiendo al personal. Todos los pasos kilométricos marcados (el km 1 estaba mal marcado, lo pusieron añadiéndole el IVA), el avituallamiento en el km 5 y al llegar butifarra, zumo, vino, helados fargi, yogurt griego la fajeda... una comilona en toda regla. Así que aunque el circuito tenga algo maldito, a meta hay que llegar.

Empezaré con el diario de guerra. A las 9:30 empezaba la batalla. Salida bastante incomoda, no se si por la velocidad, o es que yo salí clavado desde el principio. La verdad que no iba nada cómodo, pero al ser los primeros metros vas haciendo. Con los primeros metros recorridos y ya en la gran vía el grupo empezaba a romperse. Un corredor se iba en solitario y 8 perseguían. Poco a poco se abría un grupo entre esos 8 y el grupo donde venía yo. En ese momento pensé que si quería hacer algo interesante tenía que entrar en ese grupo. La distancia era mínima y era el momento de recortar esos metros. Mini acelerón y en el grupo de cabeza. Al paso por el km 1 el reloj marcaba 3:35. No me podía creer que fuéramos a ese ritmo y me llevaran tan tocado. Al terminar la carrera me enteré que ese 1r kilómetro con casi total seguridad estaba mal marcado. Y eso me hizo un poco el lío. Con este grupo fuimos hasta el km 4, todos juntos como buenos amigos. En el km 4 como por arte de magia el grupo se rompio en 2 trozos, y de ahí pasamos a correr cada uno a nuestra bola en cuestión de 100m. Cosas raras verdad? Posiblemente estaba el tio del mazo dale que te pego. Yo me quedé a rueda de mi amigo Miguel Angel, él se cortó y no hice ni el intento de ir hacía adelante.Yo se que si él va un poco decente pone la velocidad crucero y te deja en linea de gol. Por desgracia no iba muy fino y me tocó empezar a correr solo. Intenté encontrar un ritmo cómodo para llegar a meta sin hundirme del todo y salvar los muebles de la mejor manera posible. Cuando encaraba el km 5 ya en la calle de Pedro IV el viento de cara era muy incomodo, me costaba encontrar ritmo, las piernas pesaban y no llevaba ese correr alegre que si tenía la semana pasada. Al paso por el km 5 era absorvido por 3 corredores. Me enganchaba a ellos hasta el km 6,5 y ahí volvía a correr solo. Muy perjudicado y obligado podía encontrar un ritmo estable. Con mucho sufrimiento pasaba el km 7, pero por lo menos avanzaba.

Paso por el km 7 (Autora: Ana)

De ahí a meta sin novedades. Ritmo constante hasta pasar meta y parar el crono en 35:34 para ser 11º.

Días así también son muy importantes. Si en Esplugues no hubiera perdido la carrera a falta de 200m, seguro que la semana pasada no hubiera ganado. Y estoy convencido. Ayer me equivoque de salida entrando en un grupo que no era el mio, en ese momento. También es cierto que confundido por la mala señalización del km 1 (estoy casi seguro), pero al fin y al cabo error mio.

Mañana martes estaré en la I Milla del Drac, una carrera que me hace ilusión. Primera milla que corro en mi vida y una distancia que me llama mucho la atención. A ver como va la cosa. El miércoles tendréis noticias mías otra vez antes de la Cursa de la Mercè.