Foto: cursasantantoni.mundodeportivo.com
Ayer Domingo 20 de Diciembre disputé en el barrio de Sant Antoni de Barcelona si ya tradicional carrera de 10km. Una carrera que además era el Campeonato de Cataluña de 10km en ruta, lo que es sinónimo de nivel asegurado.
Tras pasar una semana prácticamente parado, donde solo pude salir el martes a rodar 6km, y el miércoles 4km y tener que volverme a casa caminando por el dolor de gemelo que tenía. El jueves, viernes y sábado los dediqué a intentar recuperar como fuera para poder correr el domingo. Correr y entrenar,que me tocaban 20 km, de los cuales 10 eran los de la carrera. Por suerte así fue, y ayer pude sumar casi 25 km. Todo un lujo tal y como había pasado la semana.
La carrera, para mi estuvo de 10. Un precio dentro de lo habitual, y una bolsa del corredor muy correcta, con la habitual camiseta el caldo aneto, un libro de Guardiola... y unos guantes!!!! Típico guante de seda que va de lujo en días de fresquito. Yo agradezco este tipo de obsequios en la bolsa del corredor, que es un detallazo. El recorrido de la carrera es bastante ameno, excepto el tramo de gran vía y paralelo que ya les tengo una manía....el resto de recorrido muy acertado. El paso de los kms bien marcado, la salida bien organizada y la llegada entretenida con un cartel que marca los últimos 400m, que siempre esta bien como referencia. En mi caso esta bien para saber si me van a pasar 2, 3, 4 o 20 porque siempre llego en reserva.
A las 8:45 salia de casa camino a la salida para encontrarme con mi abuelo. 2,5 km ya de calentamiento. Le dejé las cosas y seguí calentando porque aun quedaban 30 minutos para salir. A las 9:25 entraba en el cajón de salida, donde algunos ya estaban planeando la tarde. Al parecer se iban al cine a ver Django (la D es muda). Pues ahí estaba yo en primera final, junto a Pol Guillem, uno de los favoritos a la victoria. Por lo menos salir en la foto y hacer acto de presencia. Porque después en carrera me voy al vagón de cola y no vuelvo a ver la cabeza. A las 9:30h se daba la salida. Hago un llamamiento para que le regalen al tio de la pistola los capítulos de Barrio Sesamo donde enseñan a contar. Mientras el speacker daba la cuenta atrás. 10, 9,8.....4,3 y antes de llegar al 2, tiro que te crío. El 2, 1 se los saltó. Al margen de esta anécdota. Salida limpia, muy rápida como era de preveer, y yo con el intermitente buscando el carril para los vehículos lentos. Me va pasando gente y llego a la altura de mi amigo David (guia de su compañero Dani), "Dani ves con cuidado que este animal te gripa el motor" le estaba metiendo un paso doble mi amigo David al pobre ciego que lo llevaba contento. Ni 500m llevábamos y ni contestó. Al paso por el km 1 levanto la cabeza para ver el tiempo que marca el coche que abre carrera. 3:20. Salida decente. Me pasa mi amigo Miguel Ángel, hola y adiós. Y a seguir. A seguir sufriendo. No había manera de entrar en carrera. Que incomodidad tan grande. Iba haciendo, sin comerme mucho la cabeza pero no quería ni mirar el tiempo. Ya me encontraré lo que sea al paso por el km 5. Me pasaba alguna gente, hacía un trozo con ellos, me quedaba, me pasaban otros yo pasaba alguno. Sin encontrar un sitio claro. Al paso por el km 4 tengo la sensación de que estoy más cerca de irme a casa que de terminar. Pero tocaba sufrir. Paso por el km 5 (17:26) y cojo el agua. Me paro o no me paro. Casi andando, en ese momento con dolor en el gemelo. Por suerte llegó un grupo y decido probar suerte. Me van llevando, sufro un poco más y me engancho a ellos como una lapa para subir todo el paralelo. Callejeamos un poco y otra vez la gran vía. Como diría el Sr Recio, mayorista que no limpia pescado. ME MINAS LA MORAL, eso hace la Gran Vía conmigo. Así que poco a poco voy perdiendo metros con el grupo. No mucho por suerte, hasta que al paso por el km 8,5 aproximadamente vuelvo a recuperar con el grupo para quedarme a 3 o 4 metros de entrar al paso por el km 9. Ahí la gente empieza a forzar, se estira todo y se rompe. De uno en uno, doy un punto más para no perder demasiado y sobretodo que no lleguen más por detrás. La recta final se hacía eterna, saludo a mi abuelo justo antes de la meta y por fin el arco de llegada. 35:16 y el 82 de la general, en una carrera que por el intercambio de impresiones una vez pasada la meta a nadie le fue bien. Todo el mundo con la sensación de no coger ritmo y no acabar de entrar en carrera. Imagino que el fenómeno meteorológico este de la ciclogenesis explosiva o como se llame ha pasado factura.
Después de cambiarme y recuperar el aliento me tocó seguir rodando para completar el entreno, pensando solo en la maratón. De no ser así yo me iba a casita más contento que contento. 8,5 km más en las piernas que llegaron a casa más que justas. Justísimas, con una fatiga como hacía tiempo que no tenía. Pero todo sea por llegar al 17 de marzo en plenas facultades. Ahora y si todo va según lo previsto, semana de carga, con tirada larga el domingo, entre 30-35km.
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