Odio el frío

Vaya semanita de frío que hemos tenido, espero que se acabe pronto esta ola de frío siberiano, porque no apetece nada salir a la calle  i hacer nada. Esta mañana, a las 8:15,cuando he cogido la bici para ir al partido estábamos a -1 grado. En días como estos me alegro muchisimo de no ser ciclista, porque hacer 4, 5 o 6 horas de entreno con estas temperaturas es realmente duro. No entiende a la gente que dice, "pues yo prefiero el frío, porque me abrigo y ya esta". Las narices, que esta mañana en el partido yo llevaba 4 capas de ropa y aun así iba congelado.

Recuerdo en mi época de ciclista los 2 días con condiciones más extremas Tanto de calor como de frío. La verdad es que el día del frío lo pase infinitamente peor que el día de calor, ni punto de comparación.

 
Inicio de Begues en el Gran Premio Inauguración 2006, el de amarillo con manguitos azules soy yo

Este día de frío fue en un Gran Premio Inauguración, a finales de febrero. Ya de salida empezó a llover, y estábamos a 5 o 6 grados. Llevaba manguitos, guantes largos, chaleco... en la subida se iba bien, con el sufrimiento típico de la exigencia de la carrera, pero al menos no iba helado. El problema fue cuando empezamos a bajar y a meternos hacia el interior. Yo poco a poco iba notando como me relentizaba. Quería dar pedales y no me notaba ni los pies. Cada vez quedaba menos gente en el grupo, y no por el ritmo, sino por el frío. Lluvia, 2 grados y bajando a 55 km/h, imaginaros la sensación térmica. Llegó un momento que me entró una tiritera que me era imposible parar. Parecía que había roto la bici, pero iba helado. Pensaba que si me caía yo me hacía un 4 en el suelo y ya me recogería alguien. Me pasó el coche de equipo, y paró un poco más adelante para que me subiera. Lo que me costo parar la bici, no podía ni frenar y bajar de ella lo mismo, era como un trozo de cemento. Un día terrible la verdad.

El día de calor fue en la Copa de España del Porvenir, en Galicia. Salimos a las 3 y poco de la tarde, en plena ola de calor en Galicia, se estaba quemando la mitad de la comunidad. Los termómetros a 40 grados, no se podía ni respirar ahí, y cuando nos metimos en los bosques de Eucaliptos menos. Recuerdo que me metí en una escapada en el km 1 de carrera. Nos cogieron después de subir el primer puerto, sobre el km 70 o así, y en el pelotón no iban más de 60 corredores de 140 o 150 que salimos. Subiendo el segundo puerto recuerdo ver a un corredor caer a plomo. En el grupo de cabeza iban unos 40, y en el 2º grupo íbamos unos 20 corredores que nos fuimos para meta. De camino nos paramos en una gasolinera, cogimos una manguera y nos dimos un buen remojón, repusimos agua y para la meta. Aun pasando un mal día, nada comparable con el del Gran Premio inauguración.